viernes, agosto 12, 2022

1.281 personas han sido las dueñas del poder en Colombia

La investigadora Jenny Pearce de la prestigiosa universidad inglesa London School of Economics y el profesor de la Javeriana Juan David Velasco lideraron un gran estudio sobre el perfil de las élites en Colombia desde 1991. El Espectador habló con Pearce sobre los hallazgos de su investigación.

Juan David Laverde Palma





Jenny Pearce investiga a la sociedad colombiana desde hace décadas.

Foto: Cortesía

La investigación asegura que desde 1991 solo el 0,02 % de la población ha direccionado el rumbo de un país que hoy tiene 50 millones de habitantes. Además, documenta que 68 familias han manejado la política y que aún prevalece el patriarcado en la cúpula del poder público. El estudio perfila quiénes y cómo son las élites que han ocupado los máximos cargos en el Gobierno, los organismos de control, las altas cortes, el Congreso, los gremios económicos y los propietarios de las empresas más grandes del país. El Espectador entrevistó a la profesora Jenny Pearce al respecto.

Usted es investigadora de una de las universidades más prestigiosas del mundo, como el London School of Economics. ¿Por qué una académica inglesa se interesó en estudiar las élites colombianas?

El enfoque de mis estudios en América Latina ha sido la violencia. Se necesita más participación e inclusión en la sociedad para transformar las condiciones que reproducen las violencias. Soy politóloga, pero me considero también una antropóloga de la paz. La violencia y sus múltiples expresiones impactan más sobre las comunidades pobres, pero son los que tienen más poder y riqueza los que determinan la orientación de la economía y los valores que sustentan las diferenciaciones sociales, económicas y políticas. Aunque llamamos “élite” a los que tienen ese poder, lo hacemos con poca precisión, a pesar de una larga historia de debate intelectual. América Latina tiene un problema de violencia aguda y preocupante. También es la región más desigual del mundo. Colombia es el más desigual de los países de la OCDE y el segundo más desigual entre 18 países de América Latina, según el Banco Mundial. Desigualdad, violencia y élites son temas conectados.

¿Exactamente qué quiso explorar en su investigación?

Desde los años 70 he venido a Colombia para estudiar este país que aprecio muchísimo. De ahí surgió mi interés por estudiar las “élites” de acá, pues es un reto enorme entender por qué en cuatro décadas los niveles de desigualdad social se mantienen casi iguales, a pesar de que las personas más ricas ya no son las mismas. Antes los más adinerados eran Carlos Ardila Lülle y Jaime Michelsen Uribe, y hoy son Luis Carlos Sarmiento y Jaime Gilinski. Algo semejante ocurre con el poder político: los presidentes han tenido diferentes orígenes, algunos pertenecen a familias presidenciales bogotanas (Pastrana y Santos) y otros vienen de la provincia (Gaviria y Uribe). Entonces, vemos un cambio en la composición de las élites, pero no transformaciones reales en la desigualdad y la violencia. Ahora, es necesario entender mejor el concepto de “élite”, no para fomentar odio o rabia contra los poderosos, sino para generar un debate sobre cómo la concentración de poder político, social y económico se relaciona con factores que reproducen violencias e impiden transformaciones necesarias para una sociedad.

 



mapa del poder político en Colombia desde 1991

Foto: Cortesía de Jenny Pearce

A propósito de violencias, Colombia ha intentado muchos procesos de paz. ¿Qué encontró su investigación sobre cómo se comportaron los dueños del poder en estos intentos?

Colombia es el décimo país con más negociaciones y acuerdos de paz firmados con grupos guerrilleros y paramilitares en la historia del mundo. Precisamente, desde los años 80 hasta ahora se han desarrollado 16 negociaciones de paz y se han desmovilizado más de 75 mil excombatientes. Con las Farc ocurrió el Acuerdo de Paz más amplio y sofisticado, pero a pesar de esto el país se encuentra en una nueva fase de conflicto armado, con indicadores que podrían asemejarse a lo que ocurría a finales del siglo XX e inicio del siglo XXI en cuanto al número de masacres, la oleada de desplazamientos forzados masivos de poblaciones, confinamiento, descuartizamientos, etc. Por eso en nuestro estudio planteamos que no sería posible hacer una paz completa y reducir todas las expresiones de violencia si las élites no se comprometen a construir un Estado de derecho equitativo en todos los territorios, acepten una tributación más progresiva y se construya una seguridad pública y humana accesible a todos y todas que trascienda la protección de fincas, empresas y sitios de recreo. La seguridad debería proteger la democracia y la participación de la ciudadanía.

Aproximarse a esos grupos de poder es tarea difícil. ¿Cómo hizo esta investigación que es la primera en Colombia en documentar con nombres y apellidos quiénes han sido los dueños del país en los últimos 30 años?

En Colombia se han utilizado múltiples apelativos para referirse a las personas que mandan. En ningún otro país he visto esa abundancia de términos como cacaos, delfines, clanes, caciques, notables, barones, etc. Por eso, un primer paso consistió en tener claridad conceptual. Preferimos el concepto de “élites” que significan individuos, familias y redes que tienen la capacidad de dictaminar y reproducir los principios de dominación en una sociedad. Para identificarlos construimos un banco de datos que examinó el período entre 1991 y 2022. Así, buscamos a las personas que habían ocupado los máximos cargos en las diferentes ramas del poder público. En el Ejecutivo se tuvieron en cuenta a presidentes, ministros y gobernadores; en el Legislativo a congresistas con dos o más reelecciones; en la Rama Judicial a los magistrados de las seis altas cortes, el fiscal general, el jefe del Ministerio Público, el contralor y el defensor del Pueblo.

¿Y en el poder económico qué observaron?

Identificamos a los propietarios o accionistas principales de las empresas más grandes de Colombia, según el ranquin que publica Semana y la Superintendencia de Sociedades. Igualmente, miramos quiénes habían ocupado las dirigencias de los gremios económicos más influyentes en el sector agropecuario, industrial, comercial, de servicios y financiero. Vale la pena destacar que también se midió la tecnocracia, con cargos como el ministro de Hacienda, el director de Planeación Nacional y el Banco de la República (gerente general y miembros de la junta directiva). Toda la información que obtuvimos es verificable, pues la obtuvimos de respuestas a derechos de petición, registro de prensa y datos oficiales publicados en las páginas de las entidades públicas y privadas que estudiamos. Debo agradecer a mi equipo de trabajo en Colombia, que estuvo liderado por el profesor de la Javeriana Juan David Velasco Montoya. También hicimos muchas entrevistas en Bogota, Medellín y Cali.

¿Cómo definiría a los dueños del poder en Colombia? ¿Cuáles son sus características principales? ¿Y esas características cómo pueden explicar la realidad de Colombia, sus problemas políticos y de corrupción, el manejo clientelista del poder local? Es decir, ¿ese diagnóstico sobre las élites da razones nuevas para explicar por qué Colombia tiene tantos problemas y una democracia tan frágil?

Según el Banco de Datos, aproximadamente el 0,02 % de la población decide la dirección del país y la economía. Encontramos que así sean un número restringido, realmente las élites colombianas son dispersas y fragmentadas. Por eso en el estudio utilizamos el concepto de “constelación” para concluir que en la historia nunca un grupo de poder ha sido completamente hegemónico debido a las fracturas regionales, los orígenes sociales diversos, sus visiones de género distintas, las áreas de controversia permanentes sobre los impuestos, el modelo aperturista o proteccionista de la economía y la forma de construir Estado en los territorios. De manera que las constelaciones de élites pelean entre sí y se disputan frecuentemente quién dicta los principios de dominación. Por ejemplo, la élite judicial fue crucial para evitar que Álvaro Uribe pudiera perpetuarse en el poder, a pesar de que tenía mayorías en el Congreso y una aprobación ciudadana del 80 % al finalizar su mandato. Esta misma élite judicial fue clave para el desarrollo del Acuerdo de Paz con las Farc, al cual diversos sectores ligados al uribismo se opusieron por distintas razones.

Además de esas diferencias, ¿encontraron ustedes puntos en común entre esas élites?

A pesar de la fragmentación hay diversos temas sobre los cuales las élites han construido acuerdos básicos. Por ejemplo, la sacralización de la propiedad privada, el apego a las reglas de juego de la democracia representativa, la orientación de la política exterior hacia Estados Unidos y la primacía social y cultural de los hombres blancos que nacieron en la región Andina y se educaron en universidades privadas de Bogotá. Es relevante apuntar que cada constelación tiene rasgos particulares: la élite económica y tecnocrática es más cerrada, pues se trata de hombres blancos que estudiaron en la Universidad de los Andes y en el extranjero; la élite judicial ha permitido una mayor movilidad social, pues los magistrados han incluido a más mujeres, indígenas, negros y personas de la región Caribe. La investigación nos mostró que las personas que mandan aquí siguen educándose en las universidades privadas de Bogotá: Los Andes predominan en la tecnocracia y las dirigencias gremiales; la Javeriana en ciertos ministerios, y el Externado en la mayoría de las altas cortes.

¿Qué tan diferentes son nuestras élites con respecto a las del Reino Unido, por ejemplo? En otros términos, ¿hay diferencias notorias entre las personas más poderosas de Colombia y las de los países europeos?

Cuando empecé a trabajar en Colombia en los años 70 vi similitudes en lo que se podría llamar el “clasismo inglés y colombiano”. Sin embargo, las historias son muy diferentes. En Inglaterra la élite aristócrata latifundista fue derrotada políticamente -aunque no socialmente- en la guerra civil del siglo XVII. Los principios de dominación allí han incluido un fuerte poder cultural y social que logró construir un sentido de Nación bajo la hegemonía de la coalición de comerciantes e industriales, que buscaron dominar “las olas del mar”. En Colombia se ha hecho muy difícil construir una nación, porque las coaliciones entre élites tienden a ser muy inestables. También por la subrepresentación de la sociedad en los cargos directivos del Estado y la economía. Por eso, cuando se logran consensos como en el Frente Nacional, se excluyen -y con violencia del Estado- a enormes sectores de la población, generando así espacios para las contestaciones violentas e insurreccionales.

Gustavo Petro ganó la Presidencia con promesas de cambio profundo en el modelo agrario. Según su estudio, ¿ve posible que el gobierno que llega pueda sacar una agenda reformista tan ambiciosa?

Petro tiene la oportunidad histórica de unir a dos países diferentes. Si se analiza el patrón de votos en las elecciones presidenciales de 2018 y 2022 se observa que ha logrado consolidar mayorías electorales en el Pacífico y el Caribe, dos regiones donde se ha concentrado la violencia y la desigualdad. Pero también ha enganchado en grandes ciudades como Bogotá, Barranquilla, Santa Marta y Cali. En ese sentido, puede impulsar una amplia coalición de sectores urbanos y rurales. Sin embargo, el peso de la historia es fuerte, pues en Colombia desde el gobierno de Alfonso López Pumarejo, pasando por los mandatos de Alberto Lleras Camargo y Carlos Lleras Restrepo, hasta el punto uno del Acuerdo de Paz con Juan Manuel Santos, se presentaron frenos e incluso retrocesos en los planes de redistribución de la tierra. Entonces surge la pregunta: ¿será sostenible el plan de reforma agraria teniendo en cuenta esos vetos históricos por parte de ciertas élites regionales? La clave estará en la celeridad con la que hagan la reforma, la solidez del catastro multipropósito, la fijación de altos impuestos a los latifundios improductivos, la eficacia administrativa de las diferentes agencias estatales y asegurar que haya alternativas a la violencia para resolver los conflictos agrarios.

También hay mucha expectativa sobre los cambios que vendrán en el modelo extractivista, de pensiones y de salud. ¿Cómo lo analiza usted?

Si se analiza el ranquin que publica la Superintendencia de Sociedades sobre las empresas con mayores ingresos operacionales, veremos que en la cima de la lista están aquellos holdings financieros, compañías petroleras y EPS que se perjudicarían directamente con estas iniciativas presidenciales. En términos estadísticos, podemos estimar que llegaría a afectar a las personas jurídicas que controlan más del 40 % del PIB, si lo relacionamos con el tamaño de los activos y los ingresos operacionales de estos en 2021. Es decir, si Petro cumple a cabalidad con lo que se comprometió en campaña sobre descarbonización de la economía, pensiones y EPS, se echaría encima a los poderes económicos más fuertes. La gran incógnita es cómo reaccionaría lo que llamamos la élite oligárquica por la importancia que dan a la defensa de su riqueza, pues nunca en la historia de Colombia un presidente llegó a la Casa de Nariño con unas propuestas de reforma tan ambiciosas en diferentes frentes a la vez.

Finalmente, quisiera preguntarle por el rol de las mujeres en las cúpulas del Estado y la economía. ¿Cuáles son los hallazgos en esa materia que más le llaman la atención en su investigación?

Las mujeres siguen estando ampliamente subrepresentadas en cargos de dirección públicos y privados. El estudio mostró que de 1.281 personas que integran las élites colombianas en las últimas tres décadas, solo 178 eran mujeres, es decir, el 14 %. En el Ministerio de Hacienda, la gerencia general del Banco de la República y la Defensoría del Pueblo nunca se han elegido a mujeres en la historia. En gremios tan importantes como la Andi, Fasecolda, Fenalco, Fedepalma y Fedegán, por citar algunos ejemplos, tampoco ninguna mujer ha sido elegida presidenta. Un contraste se da en la JEP, donde casi la mitad de la magistratura está conformada por mujeres. En eso el estudio arrojó que la élite judicial ha sido la más incluyente en temas de género.


Por Juan David Laverde Palma

Periodista de la Unidad Investigativa de Noticias Caracol y colaborador del diario El Espectador. Periodista y magíster en Estudios Políticos.@jdlaverde9

jdlaverde@caracoltv.com.co

ORIGINAL DE https://www.elespectador.com/politica/1281-personas-han-sido-las-duenas-del-poder-en-colombia/ 

 

 

sábado, mayo 28, 2022

Segunda vuelta del 2018: Sin Miedo

 

https://www.facebook.com/orlandoparragopinion/posts/pfbid02to6zyXW5mngz35eJjb2CPSndrRVUyD26RxBM7MpP35xkZYXmQXknVqypBYgCJWrol

https://twitter.com/OrlandoParraG/status/1006649975550423046

Sin miedo.

Juan Carlos Escocet es un Venezolano más rico que Ardila Lulle o los Santo Domingo: ocupa el puesto 480º entre las personas más ricas del mundo. Es el dueño del banco Banesco. Si, ese señor es el más rico de Venezuela, donde gobierna el castro-chavismo ¿es rara la cosa? Si allá, según algunos, ya a todos los expropiaron etcétera, entonces ¿cómo hace ese señor para tener tal riqueza?…y hay otros, el Sr Mendoza dueño de Polar; el Sr Cisneros de varios canales; etc.
Jorge Paulo Lemann es Brasileño, y como él hay 42 ubicados entre los 1000 más ricos del mundo. ¿Pero cómo así si es que allá gobernó la tenebrosa izquierda esa por 7 años con Lula y luego con la exguerrillera Dilma Rousseff por 5, o sea 12? ¿Pero no pues que todo lo acaban? ¿Lo destruyen? ¿Y entonces estos cuarenta y dos brasileños cómo hacen para ser tan ricos? Ahh y por cierto Lula encarcelado, y Dilma destituida: tampoco se entiende: ¿No que las izquierdas destruyen las instituciones y las vuelven dictaduras?...
En Chile, el país con el más alto índice de desarrollo humano en América Latina, también ha gobernado una presunta exguerrillera, la Bachelet, y en lo que llevan de democracia después de la dictadura de extrema derecha, la horripilante izquierda ha gobernado 5 de cada 6 años. Y allá también hay MUY ricos. La señora Fontbona está en la lista de los más ricos del planeta. Y de hecho el actual presidente –de Derecha- es de los más ricos del país.
Entonces vamos descubriendo que la tal izquierda ha gobernado alguna vez en casi todos los países de américa latina y actualmente los presidentes de Salvador, Costa Rica, Ecuador, Bolivia, y Uruguay, son de izquierda… y esos países ahí van ¿o se los llevó el diablo? Ecuador, gobernado hace 11 por la izquierda ¿acaso deja de sorprendernos por su avance en esos años? ¿Y el caudillo Correa acaso NO perdió el poder y lo debió ceder? Pues eso para no hablar de Europa, donde la izquierda es poderosa hace décadas, de hecho, hoy gobiernan 6 países, ¿y? ahí están los ricos y generalmente hay una gran clase media: que es la base de la democracia.
Ninguno de esos países es más injusto en la distribución de la riqueza que Colombia –salvo uno- ¿Cuál habrá sido la diferencia? ¿habrá sido que han tenido de vez en cuando gobiernos de izquierda? ¿Será que llegó la hora de darle la oportunidad a la izquierda de gobernarnos?. Igual ya lo han hecho en municipios, gobernaciones, en Bogotá, donde algo debieron hacer bien para obtener más de un millón de votos y quedar de segundos detrás de mi candidato Fajardo…
Tengo mis distancias con Petro (y con la Robledo). No me gustan los caudillos. Ni de derecha, ni de centro, ni de izquierda. Ni los que fingen no serlo, ni los que aceptan que lo son, ni los que tienen títeres y si dejan de ser sus títeres los vuelven sus enemigos.
Empero, es la hora de saber qué hubiera pasado si nos hubiera gobernado Rafael Uribe, Gaitán, Rojas Pinilla, Gerardo Molina, Pardo Leal, Bernardo Jaramillo, Carlos Pizarro, Navarro, Carlos Gaviria, Lucho Garzón: ya es hora de que Colombia, ¡SIN MIEDO! y como el resto de tooooodos sus vecinos, elija, de vez en cuando, gobiernos de “izquierda”. ¿Tendríamos un país más justo, más incluyente, más equilibrado, con más clase media, con ricos, muy ricos, pero mejor?. Necesitamos saberlo: Votaré por el señor Petro



martes, diciembre 28, 2021

Los sesgos de la memoria , Historia y memoria.

 Memoria 



Nombre

Descripción

Sesgo de disponibilidad

Mayor probabilidad de recordar ejemplos recientes, cercanos o inmediatamente disponibles, y la imputación de importancia a esos ejemplos sobre otros.

Efecto de rareza

El material extraño se recuerda mejor que el material común.

Extensión de límite

Recordar que el fondo de una imagen es más grande o más expansivo que el primer plano [129]

Amnesia infantil

La retención de pocos recuerdos de antes de los cuatro años.

Sesgo de apoyo a la elección

La tendencia a recordar las elecciones de uno mejor de lo que realmente eran. [130]

Sesgo de confirmación

La tendencia a buscar, interpretar o recordar información de una manera que confirme las propias creencias o hipótesis. Consulte también las notas § Creencias, toma de decisiones y comportamiento .

Conservadurismo o sesgo regresivo

Tendencia a recordar valores altos y probabilidades / probabilidades / frecuencias altas como más bajos de lo que realmente eran y los bajos como más altos de lo que realmente eran. Según la evidencia, los recuerdos no son lo suficientemente extremos. [131] [132]

Sesgo de coherencia

Recordar incorrectamente las actitudes y el comportamiento del pasado como si se asemejara a las actitudes y el comportamiento presentes. [133]

Efecto de influencia continua

La desinformación continúa influyendo en la memoria y el razonamiento sobre un evento, a pesar de que la desinformación ha sido corregida. [134] cf. Efecto de desinformación , donde la memoria original se ve afectada por información incorrecta recibida posteriormente.

Efecto de contexto

Que la cognición y la memoria dependen del contexto, de modo que los recuerdos fuera de contexto son más difíciles de recuperar que los recuerdos en contexto (p. Ej., El tiempo de recuperación y la precisión de un recuerdo relacionado con el trabajo será menor en casa y viceversa) .

Efecto cross-race

La tendencia de las personas de una raza a tener dificultades para identificar a los miembros de una raza distinta a la suya.

Criptomnesia

Una forma de atribución errónea en la que un recuerdo se confunde con la imaginación, porque no existe una experiencia subjetiva de que sea un recuerdo. [135]

Sesgo egocéntrico

Recordar el pasado de una manera interesada, por ejemplo, recordar las calificaciones de los exámenes como mejores de lo que eran, o recordar un pez capturado como más grande de lo que realmente era.

Recuerdo eufórico

La tendencia de las personas a recordar experiencias pasadas de manera positiva, mientras pasan por alto las experiencias negativas asociadas con ese evento.

Desvanecimiento del sesgo afectivo

Un sesgo en el que la emoción asociada con recuerdos desagradables se desvanece más rápidamente que la emoción asociada con eventos positivos. [136]

Falso recuerdo

Una forma de atribución errónea en la que la imaginación se confunde con un recuerdo.

Efecto de generación ( efecto de autogeneración)

Esa información autogenerada se recuerda mejor. Por ejemplo, las personas son más capaces de recordar recuerdos de declaraciones que han generado que declaraciones similares generadas por otros.

Diferencias de género en la memoria de los testigos presenciales

La tendencia de un testigo a recordar más detalles sobre alguien del mismo sexo.

Efecto Google

Tendencia a olvidar información que se puede encontrar fácilmente en línea mediante motores de búsqueda de Internet.

Sesgo de retrospectiva (efecto "Lo sabía todo el tiempo")

La inclinación a ver los eventos pasados ​​como predecibles.

Efecto de humor

Que los elementos humorísticos se recuerdan más fácilmente que los no humorísticos, lo que podría explicarse por el carácter distintivo del humor, el aumento del tiempo de procesamiento cognitivo para comprender el humor o la excitación emocional provocada por el humor. [137]

Correlación ilusoria

Ver de manera inexacta una relación entre dos eventos relacionados por coincidencia. [138] Ver también Apofenia § Notas

Efecto de verdad ilusoria ( efecto de ilusión de verdad)

Es más probable que las personas identifiquen como verdaderas declaraciones las que han escuchado anteriormente (incluso si no pueden recordar conscientemente haberlas escuchado), independientemente de la validez real de la declaración. En otras palabras, es más probable que una persona crea una declaración familiar que una desconocida. Ver también en Verdad § Notas

Efecto de retraso

El fenómeno por el cual el aprendizaje es mayor cuando se estudia se extiende en el tiempo, en contraposición a estudiar la misma cantidad de tiempo en una sola sesión. Véase también efecto de espaciado .

Nivelación y afilado

Distorsiones de la memoria introducidas por la pérdida de detalles en un recuerdo a lo largo del tiempo, a menudo concurrentes con la agudización o el recuerdo selectivo de ciertos detalles que adquieren un significado exagerado en relación con los detalles o aspectos de la experiencia perdida a través de la nivelación. Ambos sesgos pueden reforzarse con el tiempo y por el recuerdo repetido o el recuento de un recuerdo. [139]

Efecto de niveles de procesamiento

Que los diferentes métodos de codificación de información en la memoria tienen diferentes niveles de efectividad. [140]

Efecto de longitud de lista

un porcentaje menor de elementos se recuerda en una lista más larga, pero a medida que aumenta la longitud de la lista, también aumenta el número absoluto de elementos recordados. [141]

Inhibición de la memoria

Si se muestran algunos elementos de una lista, es más difícil recuperar los otros elementos (p. Ej., Slamecka, 1968).

Mala atribución de la memoria

Cuando se retiene información en la memoria pero se olvida la fuente de la memoria. Uno de los siete pecados de la memoria de Schacter (1999) , la atribución errónea se dividió en confusión de fuente , criptomnesia y memoria falsa . [135]

Efecto de desinformación

La memoria se vuelve menos precisa debido a la interferencia de la información posterior al evento . [142] cf. Efecto de influencia continua , donde la información errónea sobre un evento, a pesar de ser corregida posteriormente, continúa influyendo en la memoria sobre el evento.

Efecto de modalidad

Esa recuperación de la memoria es mayor para los últimos elementos de una lista cuando los elementos de la lista se recibieron por voz que cuando se recibieron por escrito.

Sesgo de memoria congruente con el estado de ánimo (memoria dependiente del estado)

El recuerdo mejorado de información congruente con el estado de ánimo actual.

Sesgo de negatividad o efecto de negatividad

Fenómeno psicológico por el cual los seres humanos tienen un mayor recuerdo de los recuerdos desagradables en comparación con los recuerdos positivos. [143] [96] (ver también sesgo actor-observador, error de atribución de grupo , efecto de positividad y efecto de negatividad ). [107]

Efecto siguiente en línea

Cuando se turnan para hablar en grupo usando un orden predeterminado (por ejemplo, ir en el sentido de las agujas del reloj alrededor de una habitación, tomar números, etc.), las personas tienden a recordar menos las palabras de la persona que habló inmediatamente antes que ellos. [144]

Efecto de señalización de lista de partes

El hecho de que se muestren algunos elementos de una lista y luego recuperar un elemento hace que sea más difícil recuperar los otros elementos. [145]

Regla de final de pico

Que la gente parece percibir no la suma de una experiencia, sino el promedio de cómo fue en su apogeo (por ejemplo, agradable o desagradable) y cómo terminó.

Persistencia

La recurrencia no deseada de recuerdos de un evento traumático .

Efecto de superioridad de imagen

La noción de que los conceptos que se aprenden al ver imágenes se recuerdan más fácil y frecuentemente que los conceptos que se aprenden al ver sus contrapartes en forma de palabra escrita. [146] [147] [148] [149] [150] [151]

Sesgo de ubicación

Tendencia a recordarnos a nosotros mismos para ser mejores que los demás en tareas en las que nos calificamos por encima del promedio (también superioridad ilusoria o efecto mejor que el promedio ) [152] y tendencia a recordarnos que somos peores que los demás en tareas en las que nos calificamos por debajo del promedio (también efecto peor que el promedio ). [153]

Efecto de positividad ( teoría de la selectividad socioemocional )

Que los adultos mayores favorezcan la información positiva sobre la negativa en sus recuerdos.

Efecto de primacía

Donde un elemento al principio de una lista se recuerda más fácilmente. Una forma de efecto de posición en serie . Véase también efecto de actualidad y efecto de sufijo .

Efecto de dificultad de procesamiento

Esa información que tarda más en leer y en la que se piensa más (se procesa con más dificultad) se recuerda más fácilmente. [154] Véase también efecto de niveles de procesamiento .

Efectos recientes

Una forma de efecto de posición de serie en la que un elemento al final de una lista es más fácil de recuperar. Esto puede verse afectado por el efecto de sufijo . Véase también efecto de primacía .

Golpe de reminiscencia

El recuerdo de más eventos personales de la adolescencia y la edad adulta temprana que eventos personales de otros períodos de la vida. [155]

Ceguera de repetición

Dificultad inesperada para recordar más de una instancia de una secuencia visual.

Rosy retrospección

El recuerdo del pasado como si hubiera sido mejor de lo que realmente fue.

Decir es creer efecto

Comunicar un mensaje sintonizado socialmente a una audiencia puede conducir a un sesgo de identificar el mensaje sintonizado como los propios pensamientos.

Sesgo de autoservicio

Percibirse a sí mismo responsable de los resultados deseables pero no responsable de los indeseables.

Efecto de relevancia personal

Que los recuerdos relacionados con uno mismo se recuerdan mejor que la información similar relacionada con los demás.

Sesgo de autoservicio

Percibirse a sí mismo responsable de los resultados deseables pero no responsable de los indeseables.

Efecto de posición de serie

Que los elementos cerca del final de una secuencia son los más fáciles de recordar, seguidos de los elementos al principio de una secuencia; los elementos del medio son los que tienen menos probabilidades de ser recordados. [156] Véanse también efecto reciente , efecto primacía y efecto sufijo .

Confusión de fuente

Confundir recuerdos episódicos con otra información, creando recuerdos distorsionados. [157] Una forma de atribución errónea de la memoria .

Efecto espaciador

Esa información se recuerda mejor si la exposición a ella se repite durante un período de tiempo prolongado en lugar de uno breve. Véase también efecto de retraso .

Efecto de foco

La tendencia a sobrestimar la cantidad en que otras personas notan su apariencia o comportamiento.

Sesgo de estereotipo o sesgo estereotipado

Memoria distorsionada hacia estereotipos (por ejemplo, racial o de género).

Efecto de sufijo

Disminución del efecto de actualidad porque se agrega un elemento de sonido a la lista que el sujeto no está obligado a recordar. [158] [159] Una forma de efecto de posición en serie . Cf. efecto de actualidad y efecto de primacía .

Efecto de subditividad

La tendencia a estimar que la probabilidad de un evento recordado es menor que la suma de sus (más de dos) componentes mutuamente excluyentes. [160]

Sugestibilidad

Una forma de atribución errónea en la que las ideas sugeridas por un interrogador se confunden con la memoria.

Taquipsiquia

Cuando el tiempo percibido por el individuo se alarga, los acontecimientos parecen ralentizarse o contraerse. [161]

Efecto telescópico

La tendencia a desplazar los eventos recientes hacia atrás en el tiempo y los eventos remotos hacia adelante en el tiempo, de modo que los eventos recientes parezcan más remotos y los eventos remotos, más recientes.

Efecto de prueba

El hecho de que recuerde más fácilmente la información que ha leído reescribiéndola en lugar de releerla. [162] La prueba frecuente de material que se ha asignado a la memoria mejora la recuperación de la memoria.

Fenómeno de la punta de la lengua

Cuando un sujeto es capaz de recordar partes de un elemento o información relacionada, pero frustrantemente es incapaz de recordar todo el elemento. Se cree que esto es un caso de "bloqueo" en el que se recuperan múltiples recuerdos similares e interfieren entre sí. [135]

Síndrome de Travis

Sobrestimando el significado del presente. [163] Está relacionado con el esnobismo cronológico y posiblemente una apelación a la falacia lógica de la novedad sea ​​parte del sesgo.

Efecto literal

Que la "esencia" de lo que alguien ha dicho se recuerda mejor que la redacción literal. [164] Esto se debe a que los recuerdos son representaciones, no copias exactas.

efecto von Restorff

Que un elemento que sobresale es más probable que se recuerde que otros elementos. [165]

Efecto Zeigarnik

Que las tareas incompletas o interrumpidas se recuerdan mejor que las completadas.

 Tomado de https://en.wikipedia.org/wiki/List_of_cognitive_biases